Gibobs opiniones

Lo recomiendo sin dudar. Me atendieron muy bien y todo fue rápido. Una amiga me lo sugirió y al principio no sabía qué esperar. Luis García estuvo conmigo en cada paso, explicando y avisando de los cambios. Trato humano, profesional y sin rodeos. Me dejó tranquilo y agradecido, de verdad. Un punto extra por la claridad y paciencia.

Al principio lo veía como trámite, pero al rellenar todo online y hablar con Rubén me quedó todo claro (y rápido). Me ofrecieron mejores condiciones que otros dos brokers que consulté —sí, comparé— y la gestión se sintió directa y sin florituras. Un pequeño papeleo tardó un día más, pero en general genial.

se nota que entienden de hipotecas y te lo explican sin rollos, paso a paso. Vengo de líos con otra firma y esto se siente más humano, más práctico. Siempre atentos, rápidos con papeleo, y se adaptaron al cliente, cosa que se agradece.

Me pilló un poco a contratiempo buscando hipoteca, y ellos me salvaron —sobre todo por la rapidez en la entrega de documentos y lo atento del equipo. Verónica nos acompañó todo el trámite, resolvía dudas al vuelo y me mantenía al día mientras hacía el desayuno, llevaba niños, etc. Servicio gratuito y muy profesional, de verdad se nota que ayudan; me quedé más tranquilo, recomendado

menos papeleo, menos llamadas perdidas, menos noches sin dormir. Fue cómodo, práctico y hasta un poco divertido a ratos, sí, divertido. Si vais a pedir hipoteca, buscad a alguien así. Le debo un café a Verónica y lo recomiendo.

Al principio era escéptico. Había tenido experiencias lentas con otras empresas. Aquí la entrega de documentos fue más rápida de lo esperado. La atención al cliente respondió con calma y de forma útil. La asesora nos ayudó a comparar opciones y a cerrar una oferta razonable, gestionó todo y aceleró las negociaciones. El seguimiento fue correcto, respondían por correo y por teléfono. Aún quedan trámites burocráticos algo pesados, pero al final quedé satisfecho.

papeleo, llamadas y promesas. Pero el proceso resultó mucho más simple de lo que esperaba. Verónica habló con los bancos por mí, revisó y reenviaba documentos, y si algo no cuadraba lo explicaba sin rodeos. Se nota que controla los plazos y las letras pequeñas; eso dio confianza. Hubo un par de momentos de espera (algún correo tardó), pero nada grave. Lo que más me gustó fue cómo se usó el servicio: directo, práctico, sin vender humo, y con actualizaciones constantes. Al final conseguí una hipoteca con condiciones mejores de las que me habían anticipado, y eso tranquiliza. Se lo conté a otra persona ya, porque fue eficiente. Sigo algo escéptico por naturaleza, pero esta vez quedé satisfecho.

Pedí un servicio de asesoramiento hipotecario y quedé insatisfecho con la experiencia en general, ya que no cumplieron con mis expectativas y me hicieron perder tiempo innecesario.