Adam Zambrano

Lo compré con bastante recelo, la verdad —me lo planteé varias veces antes de pagar— porque el precio único ya me olía a riesgo. Vivo en el País Vasco y tenía la idea de usarla para encontrar gente cerca, quedar y alguna ayuda puntual en el día a día. Al principio pensé que era por mi perfil, pero en dos meses sólo llegaron seis propuestas realmente cercanas (y varias no cumplían lo que yo había puesto). El resto parecía cortado y pegado desde Madrid; unos 25 perfiles que la app me mostró pero que están a cientos de kilómetros. La interfaz está bien, no es un desastre, y cuando aparecen personas cercanas funciona; pero es claramente más efectiva en grandes ciudades. Al final me pasé a otra app que tiene pago mensual y hasta versión gratis con limitaciones —más movimiento, más opciones—. No es inútil, no; cumple si vives en un núcleo grande, pero para mi vida diaria aquí ha sido decepcionante y caro para lo que ofrece.